Años gloriosos

Peñarol le ganó 1-0 a Nacional en Florida y se coronó campeón por cuarta vez consecutiva.

Las dos caras de la moneda. Una moneda que fue girando a mediados de temporada, después que el equipo aurinegro fue de a poco encontrando su mejor forma, y que terminó cayendo del lado del que todos suponíamos. El martes en Florida no fue la excepción, y salvo el resultado final que (ojo) fue reflejo de los 40 minutos, después las diferencias fueron evidenciadas de manera absoluta. Un Peñarol a full, que entró a calentar media hora antes como siempre, con cuerpo técnico completo, delegado, jugadoras que no entraron en las 14 que fueron a alentar y apoyo de algunos allegados más. Nacional todo lo contrario. Una expresión insípida que llegó hasta el 10 de Julio con nueve jugadoras apenas rodeadas para afrontar una final de Campeonato Uruguayo.

En la parte deportiva puntualmente el tricolor cumplió. Sentida Sofía Ferrada en el calentamiento, se quedó sin la que podía ser su arma más peligrosa en ataque, y no le quedó otra que defender aguerridamente para bajar la talla del rival y aspirar a un final parejo. Le costó en el primer tiempo, ante un Peñarol que claramente tomó la iniciativa y buscó con absoluta disposición de pelota y espacios, la forma de convertir. Llegó al menos cuatro veces con claridad el carbonero, exigiendo a la golera Alonso, que se mostró notable, sacando remates complicados y tapando un segundo palo de forma estupenda. En una de las últimas de la primera parte, cuando el partido entraba en sus 3′ finales, una jugada por derecha de Crocano con Graña y la pelota que le queda a la capitana en posición de tiro para anotar el 1-0 con disparo cruzado.

La segunda parte se prestaba para que el mirasol amplíe el marcador. El calor desgastaba y Nacional con solo un cambio (ya que dos de las suplentes eran goleras) rotaba y jugaba con un techo muy acotado. Sin embargo el trámite transcurrió entre el no puedo y no quiero. Mucha posesión de pelota con descarga permanente hacia las líberos y el balón que poco llegó a la zona de finalización. En ese contexto el Manya fue un poco más, generando peligro ya con el partido avanzado, cuando Fanú Salazar remató un par de veces y cuando Lola Viera anticipó en ataque y sacaron el balón a un metro de la raya. Sobre el final el Bolso manó a Jime Álvez arriba, jugando decididamente vertical. Varias pelotas que viajaban para el área de Chofy pero ninguna hizo daño, más que conseguir un par de córners. De todos modos reiterar, para las condiciones en las que se presentó Nacional, fue una derrota de pie. Las chicas dieron la cara y en cuanto a marca y entrega su tarea fue irreprochable.

Y con el 1-0 se fue el partido y el torneo. Otra vez el carbonero levanta la copa y sella el tetracampeonato con merecimientos de sobra. La figura de Crocano volvió a mostrarse en nivel superlativo, con partidos de jerarquía que los abrió ella y un número final de 16 goles que la hicieron lejos la goleadora de su equipo. Destacar también lo de Shamila González, la cara nueva del Aurinegro en la temporada, de menos a más en rendimiento y con la confirmación de que tiene mucho para dar. La Chiqui Duffau y su rol clave de pivot, también tuvo gran año; Fefa Suárez y el despliegue incansable en defensa y ataque; y Lore Graña, otra que aportó cosas interesantes al equipo, alcanzando los ocho goles en 2021. Con Pelu Izquierdo como timón del barco, este Peñarol sigue navegando por años gloriosos que por el momento, no tienen ganas de atracar en ningún puerto.

PEÑAROL 1 NACIONAL 0
Final de Vuelta – Femenino. Gimnasio: 10 de Julio (Florida)
Árbitros: Analía Da Rosa y Hernán Heras
PEÑ- Iniciales: Inés Lupano, Mariana Crocano, Shamila González, Stefany Suárez, Carolina Dos Santos. DT: Andrés Izquierdo. Ingresaron: Florencia Vicente, Paula Viera, Belén Yuvet, Génesis Carrasco, Denisse Duffau, Sofía Olivera, Stefanie Salazar, Lourdes Viana.
NAC- Iniciales: Martina Alonso, Jimena Álvez, Luna Rocha, Camila Monzón, Catalina Mochetti. DT: Jorge Seré. Ingresó: Pierina González.
La MVP: Mariana Crocano

MOMENTO CUMBRE
Al finalizar el partido, los festejos y abrazos, que incluyeron el encuentro de la capitana Crocano con su compañera Lujambio, que se perdió el campeonato por una dura lesión. Lágrimas en varias jugadoras. El futsal se siente, emociona.

Desde Florida
Crónica: Luis Silva / Fotos: Claudia López y Diego Muñoz