Solo sé que no sé nada

¿Hasta el básquetbol arrancaría antes que el futsal? ¿Porqué siempre somos los últimos de la fila?

Algún día alguien encontrará una explicación coherente y convincente de porqué las cosas se dan así para nuestro fútbol sala. Lo hemos manejado en más de una oportunidad, de lo bueno que sucede en la Asociación nunca sacamos provecho; ahora de lo malo, siempre somos los menos beneficiados. Y acá lo vemos una vez más: pandemia, emergencia sanitaria, el mundo parado, muchas dificultades para retornar a la actividad… pero cuando toda esta situación se está superando, afortunadamente en Uruguay con bastante solvencia, nuestra disciplina se ve relegada en todo sentido. El fútbol profesional varios cuerpos adelante en las prioridades de la AUF ya empezó a entrenar con lo previsto en la Fase 1, mientras que de nuestro futsal se sabe poco y nada. Se han mantenido reuniones virtuales de los dirigentes del Ejecutivo y la Mesa con los de los clubes, se han barajado mil ideas y posiciones, pero el avance fue casi nulo. Es cierto que mucho no se podía hacer porque (AUF cerrada, los de arriba no dan bola, estamos esperando que nos respondan, etc) no había prácticamente forma de reactivar lo que al mismo fútbol once le costó un montón y aún hasta no tiene la fecha concreta de comienzo. La conferencia de Bauzá y Alfie fue además una muestra clara de un manejo poco claro del tema.

Y en ese mar de dudas una vez más quedamos a la deriva los del futsal. Un deporte donde todos los clubes querían volver ni bien las autoridades sanitarias lo permitieran, a diferencia del fútbol campo. Que no es profesional y que lo juegan la mitad de personas en forma simultánea. Claro, nos decían que era en un gimnasio y eso era un riesgo superior. Bueno, ahí tienen el básquetbol. La FUBB presentó todo los protocolos antes y a fines de julio/principios de agosto estaría comenzando el Metro. Un deporte donde hay mucho más contacto en la zona de contagio: manos y cara. ¿¿Cómo nos van a explicar que entonces el futsal esté arrancando DOS meses después??

Ahora sabemos que el protocolo está en el Ejecutivo de la AUF. En el mismo los test son sugeridos, no obligatorios. Se espera que la Asociación lo eleve a la Secretaría del Deporte y está junto a Salud Pública lo apruebe para luego recién tener una fecha de inicio de entrenamientos y poder confirmar que (capaz) en setiembre vuelve a rodar la pelota sobre el parquet. Un disparate. Resulta entonces, que otros deportes van a estar cursando la Fase 2 o 3 del protocolo, pasándose la pelota entre los jugadores y trabajando táctico, y ahí recién en el futsal empezar a correr de a uno al aire libre? Permítanme sonrojarme. Por otra parte los deportistas en su mayoría, se encontrarán con cierto rodaje. Nadie desconoce que muchos están desde hace semanas participando de distintos torneos comerciales de fútbol 5 y fútbol 7, o simplemente alquilando una cancha para jugar. Y otra aspecto que entra en la bolsa de desigualdades… ¿Sabrán los que se rasgan las vestiduras en radios y diarios reclamando por una parte de los sueldos de los profesionales de la A y la B, que muchos jugadores, técnicos, profesores y árbitros de nuestra disciplina no cuentan siquiera con seguro de paro y hace cuatro meses no acceden a su ingreso complementario, seguramente muy importante para el normal funcionamiento de la economía de su hogar?

Ahora que parece estamos cerca de que la Asociación se ocupe de lo nuestro y se pueda planificar algo de lo que se aproxima. Sería bueno una reunión presencial para definir formato del torneo, qué categorías jugarán y en base a eso calcular un estimativo de costos. Y los clubes no poner adelante lo económico por lo deportivo. La mayoría tenía previsto un alto presupuesto para el 2020, y si bien la crisis impacta a todos, es lógico que al haber menos partidos, menos viajes, menos todo, lo que va salir jugar este año no llega ni a un 40% de lo que se pensaba, siendo exagerado. Además es probable que AUF pueda asistir económicamente con algo más, ya que Conmebol anunció apoyos extra para el 2020 y esperemos que no sean redireccionados como tantas otras veces. En definitiva, se jugará como se pueda. Quizás hasta ya en la parte final del torneo pueda concurrir público si nos guiamos por otros espectáculos que poco a poco van a ir abriendo sus puertas. Pero dejemos de lado los pedidos que van contra la corriente de la lógica de esta «nueva normalidad», que a nadie le gusta, pero a la que debemos adaptarnos. Transitar de la manera menos «traumática» posible por ella y recargar pilas para el 2021. Igual sí, es imposible salirse de esa sensación rara, la que nos vuelve a dejar la Asociación cada vez que nos manda al último lugar de la fila. Bien pero bien atrás.